Tres muertos y dos menores heridos es el resultado de una reacción violenta que tuvo esta mañana un individuo solo identificado como Papolito, quien luego se suicidó en el batey Bienvenido de Manoguayabo.

En este hecho perecieron dos hermanas identificadas por la fiscalía como Cipriana y Santa Keriz Reynoso, de 37 y 31 años.

Las heridas, dos menores, hijas de Ciprana, fueron ingresadas en el hospital de Herrera para tratarlas por los impactos de balas que recibieron en la mañana de ayer.

Hasta el momento se desconoce de manera oficial los motivos que originaron la matanza, pero era de conocimiento de todos los moradores de dicho batey los altercados públicos protagonizados por Cipriana y Papolito por el derecho de propiedad de un terreno.

Aunque algunos vecinos lo atribuyen a una discusión entre hijas de Cipriana, una de las occisas y una del suicida-asesino a una pelea por un mango que cayó en medio de la propiedad por la que ambos mantenían una disputa pública y hasta subida de tono.

Las menores se encuentran recluidas en un centros médicos de la zona. Una de ellas, Rosa María de 14 años, fue ingresada en el hospital de Herrera para ser atendida por especialistas a raíz de los impactos recibidos en la región toráxica, específicamente en el hemitórax izquierdo lesión penetrante de entrada y salida del proyectil.

El relacionador público del hospital de Herrera, Teófilo Abreu, informó que el estado de la adolescente es estable.

Mientras que el director del centro hospitalario, Juan Álvarez, dijo que el niño de 2 años se encontraba en estado "indefinido" hasta la tarde de ayer, porque estaba siendo intervenido a raíz de la bala que se alojo en el cuello.

Una de las hermanas de las occisas, Ricarda Reynoso, dijo que desde hacía días Cipriana y Papolito habían esta chocando por el problema de tierra que los afectaba y que eso evidenció "los arranques de violencia que manifestaba y externaba el asesino, incluso exhibiendo una pistola que recientemente había adquirido".